Acabo de terminar de ver Mad Men por segunda vez —esta se me ha hecho algo pesada algunas veces— y quería compartir contigo algunas lecciones de copywriting.
Sé que te he repetido por activa y por pasiva que el mundo de un copywriter no tiene nada que ver con Don Draper y sus compañeros. Sin embargo, si rascas un poco en esa farándula de alcohol, sí que puedes encontrar algunas claves.
En este post te he rescatado 5 que he ido apuntando mientras veía la serie para hoy comentarlas contigo.
#1 Piensa mucho sobre un cliente y después déjate llevar
Don Draper es el tipo publicista al que ninguno de nosotros nos gustaría parecernos.
Creo que todos estamos de acuerdo.
Sin embargo, de tanto en tanto los guionistas le daban una frase en la que parecía que sabía mucho más de publicidad.
En un momento Don Draper le dice a Peggy que si está atascada con una idea piense mucho en ella y después se vaya a hacer otra cosa.
Funciona.
Cuando dejas que tu mente vague sola es mucho más probable que alcances ideas que de otra manera habría sido imposible.
Te funcionará.
#2 El cliente no tiene siempre la razón
Cuando contratan servicios de copy, marketing, diseño… siempre sucede algo muy curioso.
Aunque el cliente te ha elegido porque cree que tú podrás hacerlo mucho mejor que él, siempre intenta ponerte la puntilla.
Y es curioso.
Cuando un electricista viene a casa a arreglarte un problema, tú nunca le dices cómo lo tiene que hacer.
Esto es algo que solo nos ocurre a nosotros.
Por eso es importante entender lo más pronto posible que el cliente no tiene siempre la razón y a partir de ahí trabajar para hacerlo lo mejor posible.
Piensa que si sigues sus directrices, si lo haces bien será su mérito, pero si sale mal, te la cargarás.
#3 El primer cliente es siempre el cliente
Aunque suene absurdo, al primer cliente al que tienes que convencer de que la idea es buena es al propio cliente.
Cuando le presentas una propuesta es muy habitual que tenga reticencias y que tengas que convencerle.
De hecho, decía George Lois que invertirías la mayor parte de tu energía siempre convenciendo a estos.
Así que ya sabes.
Cuando hayas terminado con la fuerza persuasiva de tu copy, sácala a relucir con tu cliente.
#4 No creas necesidades, tan solo las enseñas
Seguro que alguna vez has escuchado aquella famosa frase de Henry Ford en la que decía que si le hubiera preguntado a la gente qué quería, habrían contestado que caballos más rápidos.
Henry Ford nos animaba a todos a mirar más allá y a tratar de reinventar el mundo con nuestros mensajes.
Pinta complicado, ¿verdad? Menos mal que tú no lo necesitas.
A diferencia de Henry Ford, tú no tienes que reinventar el mundo a diario, sino que basta con encontrar qué quiere la gente y por qué lo hace.
Con eso te basta para escribir un texto que sea tan persuasivo que quieran darte tu dinero.
#5 Tú también eres prescindible
Sé que piensas que eres un genio y que cualquier cliente te necesita para vender… pero no es verdad.
Como cualquier otra persona, eres prescindible y cuanto antes lo aceptes, mejor.
Si no te pasará como Don Draper que de tanto tensar la cuerda, al final salió quemado.
Pero bueno, no te quiero contar más, que quizás todavía no has visto la serie y no tienes ni idea de lo que esto significa.
Si es así, te animo a que la veas. Hay mucha ficción, pero creo que merece la pena pararse un instante con ella.
Ahora te toca a ti.
Tienes en tu mano 5 claves de copywriting que puedes aprender de Mad Men.
Como ves, la serie realista realista, no es. Sin embargo, sí que tiene suficiente chicha como para que te vayas con algunas ideas.
