Seguro que has escuchado hablar de Joseph Sugarman.
Es uno de los mejores copywriters del pasado siglo y lo que llevamos de este.
Su libro The copywriting handbook es una de esas obras que sí o sí hay que leer.
Repletas de mensajes, de valor y de acciones a realizar.
Y de todo lo que propone, hoy me quedo con algo.
Es algo simple, pero la mar de interesante.
De cómo Sugarman comprende la perspectiva de un copywriter.
¿Vamos allá?
Joseph Sugarman: el hombre de los mil hobbies
En el mundo del marketing se suele cometer un error.
Uno muy grande.
Nos obsesionamos tanto con lo que hacemos que caemos en una burbuja.
Tan solo vemos y consumimos contenido de marketing.
Así que pasan dos cosas.
La primera es que acabamos hasta las narices.
La segunda que acabamos siendo la copia, de la copia y de la copia.
Joseph Sugarman tenía una manera diferente de verlas cosas.
Una aproximación única.
Decía que un buen copywriter debía de ser una persona curiosa que tuviera cuantos más hobbies mejor.
Y que centrarnos solo en la escritura, en el marketing y en la publicidad era cavar nuestra tumba.
Duro.
Pero era una realidad.
¿Qué más haces en tu vida cuando no estás trabajando?
Una pregunta directa y sencilla.
¿Qué más haces?
¿Qué te gusta hacer?
Cuéntame tu perspectiva y trabajemos juntos.
Entre todos podemos redescubrir el poder que tiene la diversión.