Han pasado muchos años desde que me enseñaron qué es la curación de contenidos. Fue en el primer curso de marketing al que acudir de manera presencial. Era de Cálamo & Cran y se impartió en el Matadero de Madrid.
Recuerdo que tenía 19 años. Era el más joven de la sala con mucha diferencia. Tenía hasta miedo escénico de estar rodeado de profesionales. Pero allí estaba yo, con mi blog de literatura y mis ganas de aprender marketing.
Si te digo la verdad, solo me había apuntado porque el nombre de Content Curator me había llamado la atención. Mi hambre y curiosidad eran muy intensas en esa época.
¿Qué es la curación de contenidos?
La curación de contenidos es una práctica que consiste en recoger información sobre un determinada de distintas fuentes, organizarla y darle un toque propio para ofrecerla con un plus personal.
Como te puedes imaginar, roza el plagio. Pero en realidad no debería de haber ningún problema para diferenciar entre ambas ideas.
La clave de la curación de contenidos está en que quien la lleva a cabo aporta un plus a la información que encuentra. Le está dando valor.
Aunque es verdad que hay ocasiones en las que la línea es muy delgada.
¿Cómo saber si has cruzado la línea del plagio?
Sé cómo te estás sintiendo ahora mismo. Cuando a mí me empezaron a enseñar todo lo relacionado con la curación de contenidos también me olía a chamusquina.
O sea, ¿tomabas información de otros, la unías y sumabas tu parte? Pensaba que alguien se podría enfadar.
Sin embargo, no fue hasta que tuve que entregar mi Trabajo de Fin de Grado en la Universidad cuando me preocupé por ello.
Los profesores nos habían asustado mucho diciendo que tenían sistemas antiplagio. Que si lo piensas, era mentira, porque el proyecto se entregaba en papel y nadie iba a rehacerlo en digital para pasarlo por un sistema.
Así que busqué una herramienta que me ayudara a cerciorarme de que ninguna de mis referencias podría ser considerada como tal. Y la encontré.
Plagiarism Checker: ¿te has pasado de inspiración?
Plagiarism Checker es una herramienta gratuita online en la que puedes copiar tu texto y ella analiza si hay en internet contenido semejante.
Una de sus principales limitaciones es que solo analiza de 1.000 en 1.000 palabras, pero la verdad es que en dos tandas te lo tienes hecho.
Si te salta la alarma, te tocará reescribir. Tu contenido tiene que ser siempre 100 % original. Por lo menos en cuanto a la literalidad.
Una herramienta más allá de la moral
Está muy bien pensar en temas de moral, pero también hay que ser prácticos. Y sé que esto te interesa todavía moral.
Google castiga el contenido duplicado. Si esta herramienta detecta que tu contenido ya está en internet, el algoritmo del buscador también lo hará.
Te castigará no mostrando tus resultados y tendrás un problema muy grave.
Aunque solo sea por este detalle, merece la pena comprobar tus publicaciones antes de subirlas a internet.
Las 5 claves para curar contenidos como un profesional
- Curar contenidos no es plagiar.
- La diferencia está en que tú aportas tus conocimientos para darle valor a esa información.
- Google castiga el contenido duplicado. ¡Mucho ojo!
- Plagiarism Checker es una herramienta que te dirá si la información se repite en internet.
- No hagas lo que no te gustaría que te hicieran a ti.
Con todo esto ya estás en posición de trabajar la curación de contenidos que le vengan bien a tu negocio. ¿Estás preparado para ello?