Imagínate en un bar con tu buyer persona

Imagínate a tu Buyer Persona en un Bar para escribir un Copy que Funcione

Una cosa es tener un buyer persona y otra muy diferente saber cómo escribirle.

Las cosas como son.

Por mucho que yo te diga que tienes que persuadir a un perfil concreto, ¿cómo puedes ponerte manos a la obra?

La verdad es que pese a que me encantaría darte un remedio mágico, el mundo no funciona así.

Por eso te quiero contar qué es lo que hago y yo y, si te sirve, puedes aplicarlo.

¿Vamos allá?

Imagínatelo —con ropa— en un bar y explícale cómo le ayudarías

Siempre hago lo mismo.

Cuando tengo más o menos definido a mi buyer persona, busco entre mis conocidos a alguien que encaje en su perfil.

Puede ser quien sea, pero que le conozca.

A partir de ahí, tiro de imaginación.

Pienso que nos hemos ido juntos a un bar a tomar algo y que tengo la oportunidad de explicarle cara a cara cómo ese producto o servicio le puede ayudar.

En este contexto, todo cambia.

No hay palabras rimbombantes, no hay expresiones marketinianas.

Solos somos él, yo y una cerveza.

¿Qué puedo hacer después?

Una vez he realizado este ejercicio, el siguiente paso es evidente para mí.


Trato de llevarme la conversación a tierra para escribir de la misma manera que se lo explicaría con palabras.

Porque sí.

Ahí está precisamente el problema.

En muchas ocasiones nos olvidamos de la manera en la que hablamos y nos volvemos unos aburridos al estar delante de las teclas.

Nos sucede a todos.

Con este pequeño consejo te será mucho más sencillo intentar traspasar esta distancia entre la frontera oral y la escrita.