Cómo ser corrector de textos me hizo ser copywriter

Cómo ser corrector me preparó para ser copywriter

¿Te da miedo decidirte a ser copywriter porque no estás siguiendo el camino que parece mercado para estos profesionales?

Déjame adivinar. No has estudiado Periodismo. Tampoco Marketing. Y ahora quieres reconvertirte a esta profesión porque tu trabajo no te apasiona.

Estás aterrado.

Pero, ¿no te asusta más la perspectiva de continuar toda tu vida en un trabajo que no te llena?

Con este artículo te quiero animar a que te atrevas a darte esa oportunidad que tanto tiempo has esperado.

Mi primer paso en el mundo de las letras

Como siempre te he contado, en la universidad yo estudié Derecho y Administración y Dirección de Empresas.

Sin embargo, desde la segunda semana tenía muy claro que ese no sería mi futuro. Lo convertí en el famoso plan B con el que todos los padres se quedan tranquilos.

Así que llegué a un acuerdo con ellos. Yo no abandonaba la carrera si ellos me ayudaban a formarme —económicamente— en otros ámbitos en mi tiempo libre.

Me dijeron que sí y la primera formación que tomé fue la de corrector profesional en Cálamo & Cran.

Por cierto, si alguna vez te tienes que formar de manera profesional en algo relacionado con la escritura técnica, son tu mejor oportunidad.

Aquel fue el primer paso que di en la vida que quería tener, aunque por aquel entonces no lo tuviera nada claro.

¿Cuáles son las claves cuando trabajas como corrector?

Un buen corrector ortotipográfico es una persona detallista y perfeccionista.

Dos cualidades que también todo copywriter debe tener.

Trabajar durante un par de años en el mundo de la corrección de libros me ayudó a asentar estas ideas.

Sobre todo a armarme de paciencia y a saber que vestirse despacio es lo mejor cuando tienes prisa.

Todos tus pasos tienen un sentido

Seguro que has visto la famosa charla de Steve Jobs en la universidad.

Es imposible que entiendas qué te lleva a qué mientras estás viviendo tu vida. Solo le encontrarás sentido cuando te atrevas a mirar hacia atrás.

En mi caso, si no hubiera tenido un blog, jamás me habría convertido en corrector. Y ese fue el trabajo que me llevó a entender que existían otras profesiones.

Gracias a ello hoy estoy aquí. Pero con 19 años no tenía ni idea de qué me depararía el futuro.

Puede que ahora no tengas ninguna clase de formación relacionada con el copywriting, pero eso no significa que no puedas avanzar en tu camino.

Da el primer paso. Sea el que sea que tengas en mente. Te acercará a tu meta.

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