¿Cuánto tiempo lleva este blog en funcionamiento? ¿Cinco meses? ¿Y he pasado más de ciento cincuenta días hablando sobre copywriting en lugar de algo interesante como el grupo de rock KISS?
Pese a que se trate de una banda que me enamoró desde que un tío mío muy rockero me la enseñó cuando era pequeño y no entendía nada de música, la verdad es que hoy solo nos acompañarán las melodías de las palabras.
Y es que, aunque sé que no te lo esperabas, todo esto de la Fórmula KISS está relacionado la escritura persuasiva.
Pedazo de sorpresa, ¿verdad?
La Fórmula KISS es la criptonita que nuestra cabezonería como copywriters necesita. Esa que florece cuando iniciamos nuestra carrera como profesionales y nos empeñamos en escribir complejo para demostrarle al mundo que somos buenos en lo nuestro.
En ese momento todavía necesitamos que alguien nos diga que un copywriter debe transformar lo difícil en fácil. Entonces seremos los profesionales que queremos llegar a ser.
Porque mientras tú alimentas tu ego, para el resto del mundo solo eres un pedante. Y eso no mola nada.
Lo bueno es que al final te llega esa revelación de cómo debes encarar esta profesión. En ese proceso ha jugado un gran papel la Fórmula KISS.
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El propósito de la Fórmula KISS
Bueno, que ahora toca retomar la idea para no perderla de vista. No vaya a ser yo el que te hable de sencillez y me vaya por los cerros de úbeda.
Recuerda siempre que tu objetivo como copywriter es convertir en fácil lo difícil. Que, en jerga de la nuestra, consiste en explicar las ideas más complejas de una manera sencilla.
Si quieres un consejo, cuando trabajes con una idea, piensa en que se la tengas que explicar a tu abuela y que la entienda. ¿Serías capaz?
Si no es así, tampoco te entenderán tus clientes. Solo con su lenguaje querrán escucharnos. Cualquier diferencia provocará una distancia entre nosotros que no podremos salvar.
Queremos conseguir más con menos.
¿Y qué elementos componen la Fórmula KISS?
En este blog ya te he hablado de tantas fórmulas de copywriting que es demasiado optimista querer definírtelas con una palabra.
Sin embargo, te aseguro que ninguna es como esta que hoy tenemos aquí.
¿Sabes por qué? Porque esta fórmula no es una herramienta, sino una visión para el copywriter.
Una clave para el largo plazo.
A diferencia de otras fórmulas que cada parte se podía individualizar, cuando no hablamos de mecanismos y herramientas, sino de visión, todo es uno. Y esto es lo que significa KISS:
- Keep.
- It.
- Simple.
- Stupid.
Lo que en español significa: mantenlo simple, idiota.
Bastante representativo, ¿no te parece?
¿Para quién es la Fórmula KISS?
Al llegar a este punto, para mí lo fácil sería decirte que esta fórmula es para aquellos que empiezan en el mundo del copywriting.
Porque claro, son ellos los que se sienten cegados por la escritura y necesitan demostrar de manera constante.
Sin embargo, creo que si no fuera más allá te estaría mintiendo. Después de todo, cada uno de nosotros es susceptible de ser poseído por Federico García Lorca y su poesía.
La Fórmula KISS es para todos porque todos necesitamos que nos ayuden a mantener los pies en el suelo.
Todos necesitamos recordar que lo simple es más difícil que lo complejo. Es el único camino.
¿Por qué nos volvemos locos con la complejidad de los textos?
Buena pregunta. Si me preguntas a mí es porque creo que nos han enseñado que solo lo difícil merece la pena.
¿Que no me crees? Recuerda las clases de lengua y literatura del colegio e instituto. Sí, sí, esas donde se supone que te enseñarían a escribir bien.
En esas clases leemos a autores de renombre y nos encontramos con textos que nos cuesta comprender.
De hecho, todos los textos que leemos en institutos son muy difíciles y ahí está la gracia de ellos. De una manera u otra, asumimos que algo bueno y que pase a la posteridad necesita ser complicado.
Pero como nadie nos enseña que no solo se puede escribir para deslumbrar, sino también para deleitar, no comprendemos que lo simple a veces gana la batalla.
¿Cómo puedes conseguir que tus textos permanezcan simples pero efectivos?
Bienvenido a la pregunta del millón. ¡El Santo Grial del copywriting! Así que voy a intentar poner mi experiencia a tu disposición para ayudarte.
Y te digo la verdad. A mí al principio también me costó una vida conseguir este resultado. Pero con esfuerzo y siendo consciente, se logra.
Yo lo hice gracias a este esquema:
- Investiga mucho antes de escribir nada. Conocer cuál es el verdadero beneficio de aquello que vendes es la clave. Si comprendes el producto para condensarlo en un beneficio, ganarás.
- Conoce quién es tu comprador. Cuando lo tengas claro, podrás hablarle en su mismo idioma. Es decir, con las palabras que él utiliza en su día a día. Esto es importantísimo para conectar.
- Esquematiza antes de escribir. Siempre me he encontrado con personas que han escrito sin pensar y esto solo se traduce en textos largos y complejos. Sé mejor que ellos. No pongas una palabra hasta que lo tengas todo claro.
- Reescríbelo varias veces. Es un consejo muy personal. Me gusta reescribir varias veces los textos. Me permite comprenderlos y llegar a la conclusión ideal.
- Léelo en voz alta. Esta es la prueba del algodón. La clave para comprobar que tenga
Unas cuantas anécdotas personales siempre vienen bien
Y como el que se moja aquí soy yo, te quiero contar un par de experiencias que he atravesado a lo largo de mi carrera.
Porque no hay nada mejor que reírse de uno mismo.
Si te digo la verdad, al principio de mi carrera tuve muchos problemas para escribir de manera sencilla.
Si me preguntas la razón, creo que lo achacaría a que yo venía de escribir mucha novela de ficción y allí, por cuestiones artísticas, complicarlo más de la cuenta estaba a la orden del día.
Y me costaba muchísimo cambiar el chip. Te prometo que ha sido una de las cuestiones más difíciles para mí.
Incluso dentro de este propio blog se puede notar la diferencia poco a poco.
De hecho, de gran ayuda ha sido una compañera de oficina que siempre me estuvo corrigiendo al principio. Sin su necesidad de tocarme las pelotas cada día, nunca hubiera mejorado tanto.
Unas conclusiones simples a todo esto
Mira, después de haberte hablado tanto tiempo sobre la importancia de la simpleza, ahora no me voy a complicar demasiado.
Escribir de manera sencilla es la tarea más difícil para el copywriter, así que te reto a que lo consigas.
Pero si quieres alcanzar los mejores resultados, este es el único camino.
Quiero estar a tu lado en este proceso.