El código deontológico de los periodistas implica que la información que se comparte en los medios ha de ser veraz.
Que sea veraz no significa que sea verdad, sino que se hayan tomado todas las medidas necesarias para comprobarlo.
Se trata de un oficio que durante mucho tiempo ha tenido la responsabilidad de informar y darle forma al mundo que conocemos.
Tanto, que sus opiniones han sido capaces de reorganizar el mundo y hacernos ver realidades que incluso no llegaban a existir.
Sin embargo, la prensa también es un negocio.
Y si no generan los ingresos suficientes, no pueden continuar hacia delante con su labor.
Aunque los periódicos escritos nunca fueron la fuente más lucrativa del mundo, servían para mantener amplias plantillas.
Pero con la llegada de los modelos digitales, estos cada vez tenían menos importancia y tuvieron que virar el modelo.
Hoy en el pódcast hablamos de la crónica de una muerte anunciada…