¿Alguna vez te han dicho que tus precios son demasiado elevados? Peor aun, ¿en alguna ocasión te han comentado que cómo puedes cobrar por tu trabajo?
Vivimos en la era del todo gratis (una sensación que se acentúa en un país como España). Muchos de nosotros apostamos por la idea de ofrecer contenido de valor sin pedir nada a cambio (bueno, atención), como una forma de llegar hasta un potencial cliente.
¿Puede estar esto perjudicándonos?
La gente se acostumbra rápido al no pagar
Durante los últimos meses he leído a muchos profesionales que afirman que el marketing de contenidos les está perjudicando.
Afirman que una vez que acostumbras a las personas a ofrecer valor sin precio, cuando posteriormente quieres vender un producto o un servicio se ofenden por ello.
La sensación que se analiza es la del engaño. Ellos pensaban que si hacías todo gratis no es para pedir nada a cambio, sino por amor al arte. Y aunque te encante lo que haces, creo que a todos nos gusta más estar vivos.
Por lo menos yo me he viciado a eso de respirar y comer.
¿Puede usted sacar esa publicidad de Facebook?
Hace poco me encontré con un caso muy especial. Cuando trabajas con publicidad en Facebook tu alcance es tan elevado que te encuentras respuestas de todo tipo.
Entre todas ellas hubo una reciente que me sorprendió mucho. Por la educación y porque no me la esperaba de ninguna manera. Para que luego digan que está todo inventado.
El caso es el siguiente. En los comentario de un anuncio un buen hombre me pedía si podía anunciar ese producto en otros lugares, que Facebook no era lugar para la publicidad.
Y, bueno, aunque tuve ganas de contestarle que si Facebook existía era por ello, tampoco merecía la pena entrar en una guerra dialéctica. Siempre he respetado la fe de cualquier persona.
Todo esto es la evolución de nuestros primos
Sí, sí, ¿te acuerdas de cuando ofrecías tus servicios y te decían que ellos tienen un primo o un sobrino que controla de redes sociales y que se lo hace por la mitad del precio o gratis?
Si desde el principio del marketing digital (y en muchos otros sectores) no se ha respetado el valor de nuestros servicios, ahora parece que tengamos que pedir perdón por cobrar.
Me gustaría imaginarme la cara de un dependiente en cualquier centro comercial en el que dan una pequeña muestra de un nuevo producto y alguien se enfadara después porque no puede llevarse la caja gratis. Sería absurdo.
Sin embargo, internet nos ha enseñado a que todo deba ser gratis. Y, como digo, más en España.
En España es una cuestión de cultura
Recuerdo que cuando tenía dieciséis años y mis amigos se reían de mí porque pagaba por películas, música, series de televisión y videojuegos mientras que ellos los pirateaban totalmente gratis.
Yo también podría haberlo hecho. Quizá haber sido consciente desde el principio de que detrás de todo ello había personas me ayudó a no pensar de manera egoísta.
Con el paso del tiempo y las nuevas plataformas se ha asimilado más la idea de pagar, pero eso no quita que, aunque el precio te pueda parecer excesivo, robar no es una opción. Ni decirles que son unos estafadores.
El mercado funciona por oferta y demanda. Si algo no te gusta, no lo compres, pero no trates de acusar de estafa a alguien que solo quiere ganarse la vida.
¿O es que quien lo pide va a trabajar y prefiere no cobrar?
No lo sé. Solo sé que ya nadie tiene primos, sino que ahora ellos mismos pueden cabrearse porque quieras ganarte la vida con tu trabajo.
Tengo mucha curiosidad por saber en qué deriva todo este mundo.
