Cuando estaba en la Universidad veía muchísimos programas de política. Supongo que estudiar Derecho debía tener algún impacto en mí. También fue la época en la que surgieron Ciudadanos y Podemos y todo era más interesante que ahora.
Me encantaba sentarme, escuchar a los políticos y analizar qué decían unos y otros. Creo que allí me forjé mi ideología de no querer ninguna. Pero por aquel entonces tratraba de encontrarme.
Durante todo ese tiempo hubo una frase que me encantó. Al primero que se la escuché fue a Pablo Iglesias, pero estoy convencido de que tiene más años que el cuento:
Una mentira repetida mil veces no se convierte en verdad.
¿Y sabes por qué me parece tan interesante? Porque en realidad sí que se transforma.
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La política es el juego de la persuasión
Puede que a estas alturas de la vida ya te aburra. Más todavía con todo lo que ha pasado con el coronavirus. Pero si eres copywriter sé que en algún momento te ha llamado la atención.
Vale que no todos los copys se preparaban palomitas y una cerveza los sábados por la noche para pasárselo bien con ellos, pero, oye, es un juego de copy y storytelling puro.
Y cuando me refiero a puro, en realidad es simple. Para llegar a una gran masa necesitas un argumentario básico, sin complicaciones, para que puedan comprarlo de una tacada.
¿Se convierte una mentira en verdad si la repites 1.000 veces?
Sí.
Existe un principio de copywriting que afirma que cuanto más escuchas una idea, más te acostumbras a ella y es más fácil comprenderla.
Puede que al principio te pareciera un disparate. Pero a base de escucharla la normalizas. Ya no suena tan rara porque se convierte en común.
Por eso todos los políticos repiten sus burradas una y otra vez. Saben que hay un electorado en el que poco a poco cala esta idea:
- Venezuela.
- Extremaderecha.
- Fascistas.
- Proetarras.
- Bolivarianos.
Hay burradas para los dos lados porque funcionan de verdad.
¿Cómo puedes utilizar este principio de copywriting a tu favor?
La diferencia entre tú y un político es que tú tienes que ser sincero.
Quiero recalcarlo aquí para que no parezca que te estoy enseñando a mentir. El copywriting es persuasión, no manipulación.
Tu objetivo es convencer a tu cliente para que tome la decisión adecuada en el momento apropiado, ¿verdad?
Entonces puedes utilizar este mismo principio a tu favor. Repite una máxima de tu negocio de manera habitual para que poco a poco tu cliente potencial lo normalice y te compre la idea.
Por ejemplo, en Copymelo te repito hasta la saciedad que puedes escribir para conquistar a tu cliente y aumentar tus ventas.
Esto es una máxima que a medida que la utilizo hay más gente que se suma a esa creencia y consumen el contenido, se forman con los cursos, contratan mis servicios…
Puede que ese cliente no estuviera por la labor en un primer momento, pero poco a poco le pica la curiosidad.
Fíjate en cómo trabaja Nike
Nike es una historia en la que tú eres el protagonista.
Todos sus relatos tienen como centro a una persona que quiere superar todos sus límites.
Si lo piensas, es un poco absurdo para una marca que comenzó vendiendo zapatillas de deporte. Pero ella supo ir mucho más allá.
Después de varias década contando esa narrativa, ahora ya no compras unas zapatillas, sino el primer paso para cumplir tus sueños.
Mucho más épico, ¿verdad?
Esto es así porque ha trabajado a conciencia su historia y ahora todo el mundo la conoce.
Si empiezas hoy a contar la tuya, estarás mucho más cerca de conseguir el mismo impacto.
Elige tu verdad y v a por ella
Esa es la clave.
Cuéntala. Impregna tu proyecto con ella. Haz que forme parte de tu propio camino.
Poco a poco empezará a resonar.
